La enfermiza censura en Disney

Se cumplen 10 años del estreno de una de las mejores series de animación, Gravity Falls, y su autor ha querido celebrarlo quitándose una espinita que seguro que le picaba desde hacía tiempo.

Gravity Falls es, sin lugar a dudas, una de las más inteligentes y divertidas series de animación de lo que llevamos de siglo XXI. Alex Hirsch, el creador detrás de ella, ha aprovechado el décimo aniversario de la serie para compartir un vídeo en Twitter sobre lo que tuvo que aguantar del departamento de censura de Disney, llamado formalmente Standards & Practices, durante su desarrollo.

Gravity Falls comenzó a emitirse en 2012, finalizando en 2016. Aunque técnicamente sólo tiene 2 temporadas, 40 episodios y 17 cortos, transcurrieron 4 años desde la emisión del primer capítulo al último, lo que allanó su camino a la fama y el prestigio, convirtiéndose en el camino en una serie de culto al tratar a los niños como seres pensantes.

La trama siguen a dos mellizos llamados Dipper y Mabel, que pasan sus vacaciones de verano con su tío abuelo Stan en el pueblo de Oregón Gravity Falls. Allí ocurren eventos sobrenaturales propios de la Serie Expediente X.​ La trama está inspirada en la infancia de Alex Hirsch y su hermana.

El departamento de Standards & Practices de Disney le pidió a Alex una serie de cambios para que nadie resultara ofendido por la serie.

El vídeo, que el autor ha compartido, muestra la mente extremadamente enferma de los que trabajan en este departamento, donde ven obscenidades, sexualidad y problemas religiosos en frases y situaciones que a cualquier persona cuerda le costaría imaginar.

En la serie de emails mostrados, por supuesto que hay censura en relación a cualquier actitud o frase que pueda sonar remotamente homosexual, cosa que han criticado recientemente los trabajadores de Disney, pero la cosa va más lejos, pidiendo la eliminación de vagas referencias a la vagina o mencionando que un osito de peluche pudiera hacer pensar a los espectadores en sexo.

Ahora que estamos en el mes del Orgullo, Disney, y cientos de empresas, se ponen el pin arcoiris para atraer al público gay y parecer inclusivas, aunque lo que de verdad se persigue es hacer caja, como si fuera una Navidad de verano. Pero Alex Hirsch no iba a dejar que Disney se fuera de rositas este año y también publicó un incisivo Tweet sobre la deshonestidad del gigante conglomerado y su uso publicitario del Orgullo mientras, puertas para adentro, se limita toda referencia sutilmente gay en los guiones.

Disney está dando pequeños pasos hacia una real inclusión del colectivo LGBTQ dentro de la narrativa de sus creaciones, prueba de ello es la próxima película de Pixar Lightyear, que incluye un beso entre dos mujeres. Lo que no sabemos es lo que habrán tenido que sufrir y negociar puertas adentro sus creadores para hacer realidad este pequeño gesto, que ya le ha costado a la película que no se pueda estrenar en los países homofóbicos. Algo que, en honor a la realidad comercial, a Disney no le importa mucho, ya que las últimas películas de Pixar las ha estrenado directamente en Disney+, mientras que las que salían de la factoría de animación de Disney se estrenaban primero solo en salas de cine.