Milton Glaser

Rápido recorrido por la obra de uno de los mayores creativos norteamericanos de la historia del diseño gráfico.

Permitdme que haga una afirmación general sobre la forma en la que un diseñador, o un artista, trabaja al máximo de sus posibilidades. El mejor trabajo surge de la observación de fenómenos que existen con independencia unos de otros. Lo que el diseñador intuye es el vínculo o los vínculos. Encuentra una manera de unir hechos separados y crear una forma unificadora, una experiencia en la que esta nueva unidad produce una visión nueva.

Milton Glaser

Milton Glaser ha sido tal vez el representante más famoso de la escuela norteamericana de diseño gráfico. Desarrolló su carrera profesional en Nueva York, donde nació en 1929 en el seno de una familia de inmigrantes húngaros, y donde fue el alma del célebre «The Push Pin Studio«, estudio de diseño que Glaser fundó en 1954, tras haber estudiado el arte del grabado en Bolonia, Italia, en la escuela de Giorgio Morandi.

Diseñador de históricos carteles publicitarios y portadas de revistas, ilustrador de libros y diseñador de juguetes, creador de logotipos e inventor de caracteres alfabéticos. Milton se caracterizó por su interés en trabajar en todos los campos de la comunicación visual, con una sensibilidad que lo llevó a extenderse desde el Art Nouveau hasta el lenguaje narrativo del cómic.

Le llegó el reconocimiento gracias al famoso perfil del cantante Bob Dylan, para el que, como recuerda el propio Glaser en su libro Graphics Design, se inspiró en un autorretrato recortado sobre papel del pintor francés Marcel Duchamp. Glaser añadió al simple perfil masculino un elemento gráfico muy particular: la forma y el color del cabello, cuya inspiración le llegó a través de la decoración decorativa árabe. De esta extraordinaria combinación surgió un estilo muy especial, que muchos consideran típicamente americano, cuando en realidad es fruto de una experiencia cultural muy compleja.

Cartel dedicado a un trompetista de jazz africano. Versión borrador y obra acabada.

Alfabeto Babycurls. Caracteres giratorios inventados por Glaser y utilizados para el cartel de un festival cinematográfico donde, mientras una corista ejecuta un strip-tease, la leyenda gira hasta que finalmente se lee Festi Films.

Cartel para el festival de cine Festi Films

Esta es una simpática tarjeta de felicitación para las fiestas navideñas y el Año Nuevo para una productora cinematográfica. Glaser se trajo de su experiencia en Bolonia un conocimiento a fondo del arte de la imprenta que le serviría para hacer experimentos como en esta tarjeta. El cilindro entintador de la prensa de pruebas para el fotolito se disponen diferentes colores, cuando el cilindro gira, se desplaza ligeramente en sentido longitudinal, esto provoca una mezcla parcial entre los colores adyacentes, gracias a lo que se obtiene ese efecto mezcla.

Esta técnica de imprenta la volvería a repetir en este diseño de un cartel para la exposición de muebles e interiorismo Art Déco. En este caso el resultado cromático de la mezcla de colores queda acentuado por el amarillo de fondo del papel.

La formación cultural de Glaser, de origen húngaro, le llevó a estudiar profundamente el arte europeo, de ahí su uso de técnicas tradicionales en algunas de sus obras, como en el retrato de su mujer, Shirley, que posó como modelo para la cubierta de un libro de François Mauriac. Aquí Glaser se limitó a usar pluma, tinta y aguada.

Retrato de Shirley, esposa de Glaser.

Finalmente, en este rápido repaso a la obra de Milton Glaser, podemos disfrutar de una de las obras más famosas del diseñador, el cartel realizado en 1967 con ocasión del primer festival musical de la Temple University en Filadelfia. De gran elegancia, una simple clave de sol de la que surge una flor, se convirtió desde ese momento en el símbolo de dicho festival. Al igual que su icónico logo de I ♥ NY ha acabado siendo el emblema de la ciudad norteamericana.