El museo desordenado

En el sur de Manhattan hay erguido desde 2009 un "nuevo" museo, y lo hace de una manera desordenada, siendo esa su principal característica arquitectónica.

El prestigioso estudio japonés Sanaa fue el encargado del proyecto del nuevo museo de arte contemporáneo de Manhattan en 2009 y apostó por una arquitectura transgresora en su propuesta. Ahora casi 10 años después de que el edificio esté abierto al público, uno entiende qué llevó a su elección, el influjo Gehry, donde el edificio en sí es el mayor reclamo para conseguir visitantes y notoriedad.

El estudio Japonés Sanaa (Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa) creó para el «New Museum» un edificio aparentemente desordenado, que recuerda a una pila de cajas puestas sin cuidado una encima de otra. Esta puesta en escena exterior tiene mucho que ver con lo que intenta el museo mostrar en su interior: un museo sin colección que pretende ajustarse a las características cambiantes del Arte Contemporáneo.

El edificio se levanta varios pisos por encima de los típicos de ladrillo que pueblan la zona donde se asienta, el Lower East Side. Su fachada de aluminio anodizado recubre por completo las 6 cajas superiores de diferentes tamaños  (el cuerpo inferior del edificio es el único que no dispone de estee recubrimiento) colocada cada una encima de la siguiente y con un tamaño y posición distinto de la que está por debajo y por encima, esta variedad en el tamaño y proporciones permite la creación de espacios que se usan como terrazas y lucernarios.